jueves, 28 de abril de 2011

last flowers (como la canción de radiohead)

Un tipo de apariencia común. Lo mejor que hace es caminar. Lo hace tanto en momentos de lluvia como cuando el sol es intolerable. El sólo camina. Además camina solo.

Es común, verlo por las calles, hablando consigo mismo. Hay muchos que piensan que definitivamente esta loco. No obstante, hay otros, más ingeniosos, que suponen que en vez de escuchar los doors el se contenta con el mar de palabras que fluye de su boca, soliloquios interminables que hacen más placenteras sus caminatas.

Sus preguntas apuntan siempre a lo mismo; del por qué de sus decisiones, acaso si estas fueron o no apresuradas, a si el factor en ellas era su pusilanimidad perseverante. Ya no se siente triste, ni frustrado, ni amargado, como en el pasado. Hoy tan sólo está decepcionado, con su persona, con el mundo mismo.

Su barba comienza a crecer, fruto de ese desdén por lo que es. Una mirada oscilante desde la comodidad del caos. Algo así como observar su habitación; atiborrada de papeles por el suelo, la cama sin hacer, su ropa sucia apilándose en una esquina (aunque su madre pregunte todos las mañanas por si tiene y desea que se la lave). Un lugar donde también se encuentran tirados por el piso sus discos de música favoritos, así como sus libros y revistas, artículos que cobijan su vida solitaria. En su habitación sobresalen las imágenes que se encuentran pegadas a la puerta, desde retratos cruentos de lo que sucede en Haití hasta cuadros de pintores dadaístas. Asimismo están pegados algunos reportajes que le han parecido interesantes, rasgados desde las propias revistas, sobresale un titular que reza así; “La información presentada por los medios masivos invita al embrutecimiento colectivo”.

A veces, cuando se encuentra animado, siente una sensación inexplicable por querer mirar todos los escaparates de las tiendas que encuentra en su andar, esa exposición intencionada le provoca una curiosidad desmesurada, cree que la distribución y la forma en que se encuentran los objetos exhibidos tiene que ver directamente con el carácter de sus dueños, su forma de ser, sus intereses y no simplemente con alguna estrategia de venta o algo por el estilo. Realmente es un tipo extraño. En sus paseos también se detiene en algunas bancas, siempre las mismas, con el objetivo de mirar las estrellas, sin embargo, no intenta dibujar siluetas con estás, ni reconocer imágenes familiares, sólo intenta ver. Supone que distinguir el vuelo de una estrella fugaz arrebataría la capa de culpa y odio que roe los matices de vida que aún subsisten en su interior, tal como una receta mágica. De todas formas, las noches siempre terminan igual para él, dando vuelta en dirección a casa … Sin duda que es un pesimista, pero como lo dice Sabato, para serlo hay que previamente haber esperado algo. Nuestro protagonista a anhelado en demasía.

También intenta escribir. Le resulta más fácil cuando el alcohol inunda sus venas, porque, como el mismo lo ha referido a algunos de sus cercanos, la pluma necesita libertad, no ser fustigada por las constantes trabas de su ejecutor. No es que no sea un acto racional, pero entiende que necesita, aunque sea por momentos, tener una visión más intrascendente, más lejana sobre las cosas que le suceden e intenta relatar. Últimamente las noches de juerga se han intensificado, y como no, las anotaciones en su block de escritura, que esconde celosamente en su velador con llave. Es infinitamente crítico de las hojas que escribe. Comúnmente nunca culmina sus cuentos, pues éstos le parecen desprolijos, poco expresivos, carentes de esa vitalidad que debe poseer todo escrito.

Finalmente, para que aprecien la trivialidad de su vida, piensa a cada instante en el suicidio. Es terrible que alguien que ha nacido en una familia normal(no disfuncional) piense eso, pero su decepción frente a todo lo que lo rodea es, por momentos, y ya casi todos los momentos, intolerable. De todas formas intuye que no podría ser capaz de llevar a cabo su muerte, el sufrimiento de sus cercanos sería monstruoso., Paranoico no quiere sufrimientos ni pérdidas, sólo desea irse a la mierda.

martes, 19 de abril de 2011

Paranoico no quiere sufrimientos ni pérdidas, sólo desea irse a la mierda.

domingo, 10 de abril de 2011